En los últimos tiempos se nota una tendencia importante en
comunicación: el uso de Celebrities en la comunicación de las marcas. El
objetivo de esta combinación celebrities-marcas no es otro que el captar la
atención de la audiencia y el perfil del famoso debe ser el de alguien con la
capacidad de transmitir los valores de la marca, amén de ser conocido y
reconocido por el público destinatario y, por último, que ese reconocimiento
sea “amable” por parte de dicho público.
Pese a contar con detractores, vemos en todos los medios una
mayor cantidad de materiales comerciales protagonizados por famosos. En este
sentido, uno de los mayores “opositores” a su uso fue David Ogilvy, quien
opinaba que el protagonista famoso de un anuncio, pese a dar mucha notoriedad a
la marca, difícilmente cambiaba la decisión de compra del consumidor. El
publicista opinaba que en muchas ocasiones el famoso “canibalizaba” a la marca
y que el consumidor era perfectamente consciente que este prescriptor cobraba
por hacerlo, y que esto restaba credibilidad.
En cualquier caso, no parece la opinión de Ogilvy la
compartida actualmente por las marcas. El dato objetivo está ahí y está
perfectamente contrastado que la utilización de un famoso aumenta la notoriedad
de la marca, así como el retorno a la inversión, el conocimiento y el recuerdo.
En los targets femeninos, está demostrado que estos efectos son todavía más
grandes.
Con todo esto, y si añadimos la actual situación económica,
nos damos cuenta que la respuesta publicitaria debe ser lo más rápida posible y
también con la menor inversión. En nuestro caso, nuestra experiencia nos dice
que se trata de una fórmula con muchas garantías de éxito. Ya sea con la
contratación de celebrities para campañas como por el uso y comunicación demarcas y productos por parte de famosos en eventos o en su día a día.